OPINIÓN
Perdonadme este desliz
editorial en mi blog pero es que estoy en situación de hartazgo total, que no
de resignación; no en estado de desilusión, sino de difusión.
Como dijo el gran poeta: “No te dejes vencer por el desaliento. No permitas
que nadie te quite el derecho de expresarte, que es casi un deber…
No
dejes de creer que las palabras y la poesía, sí pueden cambiar al mundo;
porque, pase lo que pase, nuestra esencia está intacta….
Aunque
el viento sople en contra, la poderosa obra continúa. Y tú puedes aportar una
estrofa…
No
caigas en el peor de los errores: el silencio. La mayoría vive en un silencio
espantoso. No te resignes, huye…” Walt Whitman.
Este artículo va dedicado a
los que se apropian de lo ajeno, a los que defraudan, a los usureros, a los que
dividen, a los que no escuchan, a los que ponen su orgullo por encima de todo y
de todos, a los zafios egoístas, a los que nos faltan al respeto y a nuestra
inteligencia, a los falsos, a los renegados, a los cobardes, a los desleales, a
los ingratos, a los que odian…; como dice
el evangelista, “¡Ay de vosotros,
maestros de la ley y fariseos hipócritas, que cerráis el reino de Dios a los
hombres! ¡Ay de vosotros, maestros de la ley y fariseos hipócritas, que
recorréis mares y tierras para hacer un prosélito y, cuando llega a serlo, lo
hacéis reo del fuego dos veces más que vosotros! ¡Ay de vosotros, maestros de
la ley y fariseos hipócritas, que pagáis el diezmo de la mente, del anís y del
comino, y descuidáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia
y la fe! Hay que hacer una cosa sin descuidar la otra. ¡Guías ciegos, que
coláis un mosquito y os tragáis un camello! ¡Ay de vosotros maestros de la ley
y fariseos hipócritas, que limpiáis por fuera el vaso y el plato, pero por
dentro están llenos de rapiña y codicia!¡Ay de vosotros, maestros de la ley y
fariseos hipócritas, que sois como sepulcros blanqueados, que por fuera
aparecen hermosos, pero por dentro están llenos de huesos de muertos y de
podredumbre! Así también vosotros por fuera parecéis justos ante los hombres,
pero por dentro estáis llenos de hipocresía
y de crímenes!¡Serpientes, raza de víboras!”(Mateo 23-13,35).
Sus palabras siguen estando
de plena actualidad ¡qué poco hemos cambiado como humanidad! ¡Tan poco hemos
aprendido!
No hemos parado de hablar
durante estos últimos años de la famosa palabra…. – me niego a nombrarla- pero
al final casi todo el mundo está coincidiendo
en que se trata de una …..- me niego a nombrarla - de valores, y una
sociedad sin valores es una sociedad sin futuro.
Por todo ello, gracias a
todos/as los honestos, a los leales, a
los que cumplen con sus obligaciones, a los que unen, a los que saben escuchar,
a los humildes, a los que respetan, a los coherentes, a los valientes, a los
que aman, a los que muestran su gratitud.
Como decía el poeta “no caigas en el peor de los errores: el
silencio. La mayoría vive en un silencio espantoso. No te resignes, huye… retomemos
un grito de guerra que es fuerte y esperanzador por sí mismo, ¡BASTA YA!
José Luís Lozano Pérez.