La fiebre de 'titulitis' ha pasado de moda. Las empresas valoran en los
currículos que comuniques con tus éxitos y ejemplos de tu trabajo antes que
soltar los típicos adjetivos vacíos
Seguro que conoces ese dicho de que las palabras se
las lleva el viento o o aquello de que una acción vale más que mil palabras.
Y esto vale tanto para la vida como para la redacción de un currículo vitae que
no acabe en la carpeta de eliminados en un primer vistazo del seleccionador de personal. Vivimos, es indudable,
en un entorno muy competitivo donde competimos con muchos otros
candidatos más o menos igual de preparados utilizando los mismos canales para
acceder a las empresas y aunque las redes sociales supongan una ventaja en
comparación con otras vías que han quedado fuera de combate (el envío de
CV por correo o bien la entrega en mano), cuando un 'recruiter' debe
hojear cien, doscientas e incluso mil solicitudes de empleo, quien logre llamar
más y mejor su atención será el candidato que se lleve el pez al agua.
Entre las palabras que se utilizan hasta la saciedad y
nunca lograrán destacarte sobre tus competidores figuran “motivado”, “creativo”
o “entusiasta”
Ya hemos hablado otras veces de cuál es la forma más
adecuada de redactar un currículo, pero ahora LinkedIn, la mayor red de empleo
del mundo y la más utilizada por las empresas para reclutar a sus
trabajadores, ha analizado aquellas palabras que nunca deberíamos utilizar
porque han quedado desgastadas por su uso o porque no significan nada para las
compañías, sobre todo teniendo en cuenta que, según publicó 'The Telegraph', contamos sólo con 8,8 segundos para impresionar a la persona que
lea nuestro currículo. Así que en este caso, hacerlo mejor no significa cargar
tu perfil profesional de palabrería, sino de hechos que demuestren aquello que
intentas comunicar de ti mismo y tus habilidades.
Estas son las 10 palabras que se utilizan hasta la
saciedad en los currículos:
1. Motivado
2. Creativo
3. Entusiasta
4. Trayectoria
5. Apasionado
6. Exitoso
7. Focalizado
8. Liderazgo
9. Estratégico
10. Larga experiencia
No lo digas, muéstralo
De acuerdo a LinkedIn, nunca lograrás destacarte
sobre tus competidores si incluyes en tus CV conceptos como “motivado”,
“creativo”, “apasionado” o “entusiasta”, que se han convertido en meros
adjetivos y no ayudan a describirte. Además, se recomienda evitar palabras
que tengan un antónimo. Sugieren, en cambio, incluir fotografías y
ejemplos de tu trabajo que ilustren precisamente que eres una persona
“entusiasta” y “creativa”, explicando, asimismo, los resultados de tu trabajo
de forma mucho más visual. De nada sirve, por ejemplo, que hables de “éxitos”, muéstralos con datos o introduce las opiniones y comentarios positivos de compañeros y
antiguos jefes sobre tu trabajo.
En países anglosajones incluir experiencias de
voluntariado es muy valorado, porque te presenta como alguien comprometido,
generoso y responsable
También puedes tu pasión o creatividad no solo con
ejemplos, sino buscando un enfoque original, o añadiendo un apartado con otros datos de interés donde hables sobre
otras actividades que realices fuera del trabajo, pasiones, voluntariados…
Respecto a este último, hay que tener en cuenta que en países anglosajones las
experiencias de voluntariado son muy valoradas, pero hay que esperar que en
España empiecen a tenerse en cuenta estas acciones altruistas como muestra de
la valía, el compromiso y la responsabilidad de un futuro trabajador.
No obstante, LinkedIn nos sugiere que no optemos por
rellenar con comentarios sobre habilidades obvias que, en cualquier
caso, forman parte de las exigencias de un puesto de trabajo, como ser
cooperativo, flexible o buen comunicador.
Y una curiosidad: parece ser que la llamada “titulitis” de los
últimos años ya no es tan importante como ser habilidosos. Lo que decíamos, en
un momento en que quien más y quien menos tiene un máster y dos postgrados,
lo más importante es demostrar que eres el mejor para ocupar un puesto a través
de tu experiencia y tus cualidades profesionales y humanas.
Y sobre todo, no desesperes. Acaba de empezar el año y
te quedan por delante muchos meses para que tu plan de búsqueda de trabajo,
tanto si no lo tienes como si necesitas un cambio, dé sus frutos.
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